Me despierto y lo puedo sentir, ya está aquí, siempre ha estado, es mi amigo más fiel, lo puedo oler, lo puedo mordisquear, lo veo, pero nadie más lo hace, grito, grito intensamente, pero nadie me escucha, ¿Por qué nadie me oye?; estoy gritando todo el día, permanentemente, con mis ojos, con mi piel, con cada sentido corporal, solamente yo me escucho, pero ¿Qué puedo hacer yo?
El sol no está, ¿A dónde se ha ido?, todo se ha vuelto monocromático, salgo a la calle y todo es gris, ¿Quién se robó los colores?, no puedo recordar si todo siempre fue así, estoy sangrando y no se que hacer, nadie me ayuda, ¿Acaso nadie ve la sangre?, me ahogo en mi propia existencia, me ahogo en litros, ríos y mares de mi propia sangre, quiero nadar, quiero salir a flote, en verdad lo deseo, lo intento con todas mis fuerzas, con cada una de ellas por pequeña que sea, voy en contra de la corriente, pero justo cuando llego a la superficie algo me atrapa y me arrastra consigo a lo mas hondo de la oscuridad y entonces dejo de respirar ¿Qué quieres de mí?, ¿Acaso mi destino es este?, ¿Tendré que soportar esto toda la eternidad?
Solo tengo unos pocos segundos para respirar y se sienten tan bien, joder es el paraíso, parece que todo es más liviano, allí esta el sol, y lleno de colores está el mundo, me encanta lo que veo y lo que siento, pero no dura más que un instante, un misero, pequeño pero reconfortante instante; de nuevo vienes tu por mí, de nuevo quieres hundirme, no, no eres la gravedad, tampoco satanás, no sé qué eres ¿Quisieras presentarte?, quizás podemos ser amigos y entendernos, si tan solo tuvieras mi corazón y sintieras mi dolor me dejarías, la verdad no se de donde saco la fuerzas para luchar contigo todo el día, todos los días, toda la vida.
Nunca he entendido porque simplemente no me dejo arrastrar hasta lo más profundo, donde no tenga que luchar más, y todo pueda ser más bello ¿Qué me lo impide? No tengo idea; veo una luz titilando y la sigo, me aferro a ella con todo lo que queda de mí, eres hermosa lucecita, nunca había visto algo tan perfecto, espérame, no me dejes, solo por ti lucho. Quisiera saber que pasa, pero nunca hay respuestas, ni en la mente más brillante ni en el libro más codiciado, ¿Qué hago? Debería conformarme, debería seguir nadando contra la corriente por muy cansada que este, o quizás me guste más el fondo, pero es incierto, me da miedo la incertidumbre.
Quisiera renunciar a mi cuerpo y ver si con él te vas, pero ¿Cómo sé que no te quedaras en mi alma también?, quisiera ser el viento para que no me pudieses detener, quisiera ser un pez para que no me pudieras ahogar, quisiera volar para huir de ti, pero solo soy carne. Definitivamente no hay nada que quisiera más que ser libre, y si algún día lo llego a ser, sonreiré por ti y por mí, por ambos y por la vida.
No hay comentarios:
Publicar un comentario